Hay una avería permanente en el embrague. Estacione el vehículo de forma segura. Solicite la ayuda de un profesional.

Hay una avería permanente en el embrague. El par motor está reducido. Puede seguir conduciendo. Al hacerlo, evite procesos de embrague en los que éste se vea sometido a grandes esfuerzos. Por ejemplo, al arrancar en subidas o al maniobrar, no mantenga el embrague medio accionado durante mucho tiempo. Diríjase a un taller especializado, en cuanto pueda, para que subsanen la anomalía.

Hay una avería en el embrague. El par motor está reducido. Puede seguir conduciendo. Al hacerlo, evite de ahora en adelante procesos de embrague en los que éste se vea sometido a grandes esfuerzos. Por ejemplo, al arrancar en subidas o al maniobrar, no mantenga el embrague medio accionado durante mucho tiempo. El testigo de control se apagará en cuanto la capacidad de transmisión del embrague se haya restablecido por completo.